Cascara de Naranja

Cuantas veces habremos pelado una naranja, con cubiertos, con las manos, a mordiscos incluso, cuando no teníamos más opciones.

También es posible que para utilizar en repostería, incluso en alguna receta algo más curiosa, un poco más original, nos dediquemos a "rallar" la cáscara de la naranja.

Lo normal es poner especial cuidado en hacerlo bien, ya sea al pelar la naranja, o al rallarla, para que esa parte intermedia, de color blanco, con un sabor amargo? no altere el sabor que vamos buscando.

Esa parte de color blanco, ayer me gasto una jugada, ni Buena, ni Mala, solo una jugada. No calcule bien, y me quedé sin saber que hacer.

Estar saboreando durante los últimos días tu presencia, tu sonrisa, tus miradas, esos "geitos", esa forma de ser, estar saboreando durante tanto tiempo seguido, sin posibilidad de recuperarme, me han hecho quedarme "a medias" sin saber que hacer.

Sentirme tan cerca de TI, notar que estabas ahí, que aceptabas la invitación, que estabas casi casi por escuchar mi voz, recordar que momentos antes me decías " Lo más bonito de mis ojos, es el reflejo de los tuyos", todas esas cosas chiquitas, a las que al parecer somos tan aficionados, son las que me dejaron casi casi a TU merced.

Empecé a acercarme, me dejé seducir, igual que las sirenas de la mitología, me atrajiste hacia TI. Igual que en la mitología, Yo también sucumbí, cuando intenté recuperar un poco de juicio, cuando quise volver a ser un poco menos Yo, cuando la cordura intentaba convencer a la locura que siento cuando estoy cerquita de TI.

El resultado? como cuando no prestamos atención mientras usamos la cascara de naranja, y saboreamos esa parte blanca, con sabor diferente.